La cineasta Sofia Coppola volvió a ser ovacionada el viernes por la prensa especializada en el Festival de Venecia con "Somewhere", un retrato de la soledad de un actor en Hollywood, donde compite con otras 23 películas.
Al parecer Coppola quiere volver a sus raíces de "Perdidos en Tokyo", con una película que otra vez se centra en un hotel, pero en esta ocasión en el Chateau Marmont de Los Ángeles, bien conocido por los actores de Hollywood, y es que en Somewhere, se...
narra el recorrido existencial de un divo, Johnny Marco (interpretado por Stephen Dorff), que pasa de llevar una vida frívola, a bordo siempre de un Ferrari negro y con cientos de chicas bellas rendidas a su pies, a intentar ser y sentirse padre con la llegada de su hija (interpretada por Elle Fanning).Sofia Coppola apasiona al público y a la crítica siempre con su estética lírica a la hora de narrar historias, sus personajes solitarios divagando por el mundo, descubriéndose, errantes en un universo que les es ajeno. Desde "Las Vírgenes Suicidas", pasando por su obra maestra "Perdidos en Tokyo", llegando a la encandiladora "Marie Antoinette", Coppola se ha consolidado como una de las mejores directoras de su generación.
En Somewhere, la exquisita madurez de Coppola se revela en los preciosos planos largos, en su ritmo deliberadamente dilatado que ocasionaron una larga ronda de aplausos y las primeras habladurías sobre los premios que debería recoger la película.
Con pocos diálogos, muchos silencios, un bólido como compañero de vida y un hotel como punto de referencia, el filme de Coppola combina escenas divertidas con sentimientos, buena fotografía y música con situaciones graciosas con la prensa y en los programas de variedades de la televisión.
"Es evidente que el filme tiene muchas cosas de mi vida, anécdotas e historias que viví, aunque mi padre era muy distinto al protagonista del filme. La escena en un casino en que enseña a la hija a jugar la viví de verdad con mi papá", confesó la cineasta, hija del renombrado director y productor Francis Ford Coppola. La película se estrena a finales de diciembre en Estados Unidos.
Otra de las principales competidoras es la francesa "Happy Few", de Antony Cordier, quien explora el universal tema de la atracción fatal y la vida de pareja, con escenas de sexo que escandalizaron a algunos, es una reflexión sobre las convenciones sexuales, las inseguridades y celos que suscita superar los límites de la propia libertad.
El sábado se proyectará otra película francesa "Potiche" de François Ozon, con dos leyendas del cine, Catherine Deneuve y Gérard Depardieu además de "Post Mortem" del chileno Pablo Larraín, único latinoamericano seleccionado para la competición oficial.
Fuente: Google noticias
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